Empezamos con un nuevo reparto de alimentación para las familias desplazadas en Yemen.
Desde que llegó la pandemia, en Occidente no se habla de otra cosa. COVID a todas horas y en todos los medios.
Pero cuidado, SOLO el COVID que nos afecta a nosotros. A los blancos. A la parte privilegiada del mundo.
La pandemia en realidad es occidental, afecta a occidente, ha traído el terror a Occidente. Importa SOLO lo que ocurre en Occidente
Lo que el virus hace en otras partes… eso son «daños colaterales», no es ni mínimamente importante…
Pero a pesar de que a nadie le importa lo que el COVID19 hace o no en Yemen, nuestro pequeño equipo, liderado por Faten, trabaja sin descanso sabiendo que ese enemigo es otro más al que combatir. Y decimos otro, porque mientras para el mundo occidental parece que solo existe el COVID, para Yemen, la pandemia se suma al resto de horrores que ya viven: hambre, bombas, cólera, difteria, desnutrición, bloqueo…
Aquellos a los que Galeano llamó LOS NADIES; los pobres entre los pobres… de esos no se acuerda nadie, ni para hablar del COVID ni para hablar de NADA.
Parecería que en Yemen mueren de hambre por una especie de «castigo divino». Como si el bloqueo, las bombas, no fuesen Made in Occidente… Como si los que ganan dinero a manos llenas vendiendo armas no fuesen de aquí, muy de aqui.
¿Sabéis lo triste que es que llevemos casi 5 años y medio en Yemen y no podamos trabajar en red con ninguna otra ONG pequeña. de aquí, que también esté allí? Y no podemos porque NO HAY MÁS. Seguimos solas, como al principio.
Pero seguimos como siempre, con un nuevo reparto de alimentación para las familias desplazadas, dando agua, productos de higiene… Faten no entra en las «casas» (por llamar de alguna manera los lugares donde malviven). Le hemos pedido que reparta en el exterior. Es menos peligroso, menos fácil contagiarse… porque observaréis que el uso de mascarilla es nulo… «Entre comprar una mascarilla y unos gramos de arroz… tenemos que comer». Esa es la cruel realidad que nos cuentan.
Ahora mismo, tenemos en marcha una campaña de mantas para los campos de refugiados, porque llega el frio y también morirán de eso (una cosa más, y ya van…). Pero en otros lugares, para otras causas, las pequeñas ONG se agrupan, se unen para ser más fuertes, para lograr más ayuda.
Nosotras no podemos, porque no hay con quién unirse…
Si pensáis eso, más el hecho que el bloqueo del país impide el envío de nada material y solo nos queda siempre lograr el dinero aquí para enviárselo a Faten, podéis imaginar que el trabajo, con la situación económica que ha generado la pandemia y la disminución de las donaciones, no es fácil.
Pero recordad nuestra máxima: INSISTIR, PERSISTIR, RESISTIR Y NUNCA DESISTIR!
Así que ahí seguiremos, sin pausa!!!
Y si quieres ayudarnos a seguir, ya sabes:
Campaña de mantas:
Donar por otras vías:
GRACIAS!!!!