Relleno de agua en los campos de refugiados en los que proporcionamos agua. Cada vez más desesperación, cada vez más horror.
Faten escribe hoy: «La gente no aguantará mucho más. Han salido a las calles, les están apaleando».
Desde 2017 Yemen vive la mayor epidemia de cólera que ha habido en la historia.
Cuando la epidemia empezó, la ONU (siempre ella, qué lástima…) dijo que era tal el número de infectados, que no «valía la pena» enviar vacunas ni gastar dinero en ello, porque el número de infectados y muertos era imparable.
Claro, eso lo dijo a los 3 meses de la epidemia, no a los 15 días, que es cuando debería haber actuado….
Más de 1 millón 300 mil personas se han infectado desde entonces, en un país sin infraestructuras, sin saneamiento, sin posibilidades de potabilizar agua en las casas, y sin un sistema público de agua (es decir, no se abre el grifo y sale agua potable como en nuestras casas). Solamente los pocos privilegiados con trabajo o salario, pueden tener su propio tanque de agua en el techo de su casa, y rellenarlo pagando a los camiones cisterna privados.
Casi el 30% de los casos de cólera son niños y niñas menores de 5 años.
Una de las estrategias favoritas de Arabia Saudí y sus aliados (EEUU, Gran Bretaña y Francia) es bombardear las plantas y sistema de saneamiento de agua.
No creemos necesario recordar aquí que una parte del armamento que está asesinando y destruyendo Yemen es español (y de media Europa además de estadounidense).
Actualmente casi 18 millones de personas necesitan urgentemente acceso a agua potable para no morir de cólera o de otras enfermedades derivadas del consumo de agua contaminada. Más de la mitad son niños.
Desde el 2016 tenemos en marcha nuestro proyecto Agua Para Yemen.
Empezamos instalando 2 depósitos de 2000 litros cada uno en un campo de refugiados en el norte del país.
Actualmente tenemos 44 depósitos de agua, en 3 campos de refugiados y en 5 escuelas.
Damos agua cada semana a más de 7000 personas, que gracias a ello no se contagian y mueren de enfermedades totalmente prevenibles.
El agua ha aumentado más de un 300% su precio desde el inicio de la guerra. ¿Quién puede pagar eso si no hay apenas salarios en el país desde hace casi 6 años?
Si la guerra en Ucrania afecta a todo el planeta, en lugares como Yemen significa un desastre de magnitudes bíblicas: no hay gas, no hay gasolina, no se puede extraer agua del subsuelo porque la maquinaria no funciona, no hay cereal y por tanto la hambruna y el cólera matan y matarán aún más de lo que ya llevamos viendo estos 7 años.
Pero son yemenitas. Su sangre parece que no mancha las manos de quiénes les matan.
Necesitamos urgentemente que nos ayudéis a seguir. Son momentos tan complicados que nos cuesta hasta explicarlos.
Con 1€ pagamos 118 litros de agua (probablemente ahora menos, nos falta el precio de estos últimos días), Una persona en un campo de desplazados necesita mínimo 5 litros de agua al día para sobrevivir.
AYÚDANOS A SALVAR VIDAS. ELLOS TAMBIÉN CUENTAN!!
